Fernando G. Toledo: «Cuando hay buena literatura, buenos docentes y buenos lectores, los frutos son invalorables»
El poeta, narrador y periodista mendocino Fernando G. Toledo presenta su último libro, La ilusión de un gran final, el próximo 24 de junio a las 20, en la icónica escuela San Martín del departamento de San Martín.
por Ailén Pelayes
La ilusión de un gran final es la nueva obra literaria del reconocido escritor y periodista mendocino Fernando G. Toledo. Este libro reúne 22 historias con personajes que son conocidos por todos: Mozart, Marilyn Monroe, Leonardo Da Vinci, Liliana Bodoc; entre otros. La idea del mismo fue utilizar las herramientas literarias, las mismas que pueden servir para escribir un cuento, pero esta vez en relatos reales, con información documental. Eso hace difícil ponerle una etiqueta: puede tomarse como un libro de cuentos de no ficción, como uno de crónicas o como una combinación de ambos.
El título del libro es, a la vez, el nombre de uno de los relatos que contiene y cuenta la vida Joyce Hatto, una pianista que tiene una historia fascinante y escandalosa. «Esa frase la dice su marido al tratar de explicar las razones de lo que hizo (no adelanto más para no arruinar lo que está escrito en el texto), pero me pareció a la vez un buen título porque representaba muchas cosas: lo que uno espera cuando se deja llevar por un buen cuento y lo que yo mismo fui viviendo en la escritura de cada uno y en la conformación del libro como un todo. Quería que el resultado fuera digno y espero haberlo conseguido», explicó el escritor al consultarle sobre el origen del nombre.
El proceso creativo de este nuevo libro comenzó, casi de casualidad, por el año 2011 al comenzar a escribir columnas de opinión para Diario Uno donde era editor de espectáculos. Esas columnas fueron su propio taller literario, como él lo denomina.
«Como soy periodista no quise ofrecer ficción allí, sino justamente combinar la investigación documental, realista, con los recursos de la narrativa. Así que fui tomando a personajes del arte y el pensamiento para contar de ellos o bien el recorrido de todas sus vidas o anécdotas de la misma que fueran atractivas como historias», contó.
Cada una de esas historias le demandaba semanas de investigación, hasta llegar a la ya de por sí compleja tarea de la escritura. «También hubo mucha investigación infructuosa, horas y pilas de libros leídas que no acabaron en columnas, pero el proceso fue enormemente placentero. Así comenzó un largo recorrido que trascendió los medios, ya que publiqué en Uno, en Los Andes y en algún medio de Buenos Aires versiones previas de estas historias. También hay algún inédito, por supuesto».
Un gran libro merece una gran presentación, por ello la misma tendrá características espectaculares. Se llamará Concierto para libro y orquesta y será el próximo 24 de junio a las 20 en la icónica escuela San Martín del departamento de San Martín, cuyo edifico tiene un gran salón donde ensaya y se presenta la Orquesta de la Municipalidad.
La presentación hilvanará textos del libro, las palabras del poeta y narrador Hernán Schillagi (el invitado) «y las mías, con la música que irá interpretando la orquesta que dirige magníficamente Hugo Arcidiácono. La Municipalidad de San Martín, la ciudad donde nací y donde vivo, ha hecho un generoso aporte al permitirme esa presentación y ha sumado el evento a su agenda en el mes del escritor».
El libro se podrá conseguir en esa presentación, pero también se puede conseguir contactando a Fernando en sus redes como Facebook, Instagram o Twitter, donde podrán conseguir el ejemplar con una dedicatoria y a un precio promocional. A partir de julio, habrá ejemplares en algunas librerías del centro de Ciudad.
Al ahondar un poco en el escritor y consultarle qué cambios advierte entre el Fernando que escribió su primer texto y el escritor que es ahora, manifestó: «Es muy interesante pensar en eso. Yo creo que aquel Fernando tenía un combustible que hoy escasea, y es el de la creatividad imparable, la osadía y la alegría del aprendizaje. El de hoy es, sin duda, más cauto, piensa mucho más cada palabra elegida, pero está hecho sin dudas con el molde de aquel principiante que fue aprendiendo, poco o mucho, esta tarea de construir edificios de palabras, que son como casas de naipes, frágiles y a la vez fascinantes».
A pesar de que aún no es presentado formalmente este nuevo libro, Fernando ya tiene prácticamente listo un nuevo libro de poemas y un proyecto que es, para él, un nuevo camino en su trayectoria.
«Después de seis libros de poemas y de dos novelas, espero reunir un grupo de cuentos como para un libro. Ese trabajo es el que hoy en día me desvela», expresó.
Finalmente, cerró con una reflexión acerca de la lectura y los escritores de nuestra provincia:
«Mendoza tiene hoy en día a escritores, tanto narradores como poetas, que están produciendo importantes obras, que los lectores de nuestra provincia no deberían desatender. Tampoco aquellos que forjan lectores o dedican su tiempo a enseñar. Estoy hoy en día viviendo una hermosa experiencia con escuelas de Mendoza que están abordando algunos de mis libros (puntualmente, El mar de los sueños equivocados y el más reciente, La ilusión de un gran final) y esto resulta fructífero para todos. Por un lado, para los escritores, que además tienen la oportunidad de que sus libros se vendan y se lean. Por otro, para los jóvenes lectores, que leen a autores que tienen cerca y a los que pueden hablarles y consultarles. Por último, y no menos importante, para los docentes. Son estos los que muchas veces deben dar el paso, estar atentos a lo que se escribe y publica hoy en día e incluirlo en su trabajo de lecturas con los chicos. Eso forma un círculo virtuoso, cuando hay buena literatura, buenos docentes y buenos lectores, cuyos frutos son invalorables».
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