Fernando G. Toledo, de crítico de la Vendimia a guionista de la Bendición de los Frutos

En 2019, en el último día de febrero de otro año bisiesto, se estrenó la fiesta escrita por Fernando G. Toledo, en el Parque Agnesi de San Martín. El autor había escrito críticas de los actos centrales durante 20 años antes de afrontar ese desafío. A continuación, la entrevista que publicó Los Andes a propósito de ese espectáculo.

por Mili Rivas


Como siempre los actos centrales de la Vendimia en Mendoza son inaugurados oficialmente con la tradicional Bendición de los Frutos, que desde hace años se federalizó y ya recorrió diferentes oasis de la provincia. Este año el departamento elegido por el Ministerio de Turismo y Cultura es San Martín y la fiesta será el 29 de febrero, en el teatro griego del Parque Agnesi.
La particularidad para esta edición es que el encargado de escribir el guion es el periodista, poeta y escritor Fernando G. Toledo, quien por más de 20 años ha escrito críticas periodísticas de Vendimia y ha cubierto fiestas departamentales y centrales para varios medios periodísticos.
La propuesta llegó al inicio de sus vacaciones e inmediatamente dijo «acepto«. «Me llamó Laura Uano, directora de Cultura de San Martín, cuando estaba en mi auto listo para emprender unos días de descanso y sentí que no podía decir que no, porque soy de San Martín, lugar donde nací y vivo y me sentí honrado por ser elegido», contó a Los Andes, diario donde se desempeña actualmente como Editor de Sociedad.
Toledo confesó también que esta no es la primera vez que lo convocan para estar en la parte creativa de una Vendimia, pero recién ahora aceptó, por sentirse ya capacitado para encarar el gran reto: «En todos estos años recibí varias invitaciones para escribir guiones, tanto de fiestas departamentales como centrales y siempre dije ‘no’, porque a pesar de haber escrito muchas obras teatrales no me sentía listo».
Y aseguró que la confianza la ganó luego de escribir obras de teatro de gran complejidad, como por ejemplo De Mendoza a Tokio. Un homenaje a Víctor Volpe, que se estrenó en el año 2016 en el Teatro Independencia o con Los sonidos de la buena memoria , que propone el desarrollo de una pieza teatral en medio de una interpretación orquestal, y también se llevó al escenario del teatro mayor en 2018.
Este año la propuesta para ser guionista de la Bendición fue muy tardía, ya que careció de la anticipación que habitualmente tienen estos tipos de proyectos, por lo que Fernando apeló a la experiencia de su profesión para sacar provecho y evitar que el poco tiempo fuese un impedimento.
«Siempre me ha gustado asumir desafíos. Y, modestia aparte, no se cuántos se hubiesen animado a tomar el compromiso con tan poca antelación. Por eso sin duda mi parte de periodista me ayudó, ya que estamos acostumbrados a trabajar contra un reloj que nos persigue a la hora de entregar una nota», dijo entre risas el escritor.
Con respecto a la Bendición de los Frutos, el poeta aseguró que nunca dimensionó la importancia de la celebración hasta ahora que le toca estar del otro lado: «Como periodista tal vez no supe verlo en su total dimensión, pero hoy desde esta perspectiva entiendo que después del Acto Central, es la segunda fiesta más importante de todos los festejos vendimiales».
«Es un pequeño Acto Central por su despliegue y trabajo en cuanto a los aspectos técnicos, lumínicos y artísticos. Es el mismo formato de un espectáculo de la Fiesta de la Vendimia pero con un condimento extra que es la parte religiosa y toda la herencia cultural que eso significa», analizó.
Y remarcó: «La cosecha no llega por sí sola, sino que es producto de mucho trabajo como podar,  arar o atar la viña. Y siempre con la amenaza constante del granizo y la helada. Por eso considero que la Bendición de los Frutos representa mucho más el sentir de quien celebra una cosecha, practique o no algún credo. Porque simboliza la esperanza de un pueblo».
Sobre el argumento narrativo, Fernando no quiso adelantar mucho, simplemente contó que será fiel a su estilo y que al igual que las obras que escribe tendrá «grandes dosis poéticas, el recurso de contar un tema general a través de una historia individual, y mucho peso teatral», algo que siempre reclamó y criticó de las vendimias: «Nunca entendí cómo era posible que en una provincia con tanta trayectoria teatral no se incluyeran más escenas dramáticas y actuadas. Creo que los directores tienen que atreverse», afirmó.
Y rescató de su memoria la frustrada Vendimia del año 2012, que fue dirigida por Walter Neira y solo tuvo la noche del Acto Central, porque las repeticiones se suspendieron por una protesta de los artistas: «Justamente esa Vendimia fue, para mí, la mejor de los últimos 25 años. Había teatro y mucho talento. Lástima que solo se pudo disfrutar una noche».
Por estos días Toledo ya trabaja con Iván Martínez, quien será el director de la celebración ecuménica y el encargado de dar vida al guion.

Perfil
Poeta, narrador  y periodista. Nació en San Martín en 1974. Estudió Comunicación Social en la Universidad Juan Agustín Maza. Comenzó su trayectoria periodística a los 19 años como redactor y actualmente es editor en Diario Los Andes. Autor de libros de poemas desde el año 1998. Entre ellos se destaca Hotel Alejamiento, Diapasón, Secuencia del caos y Viajero inmóvil.
En 2013 creó y dirigió el Primer Festival de Poesía de Mendoza, que se realizó en el marco de la Feria del Libro de esa provincia y tuvo sucesivas ediciones desde 2014 a 2018.
En 2014, publicó la novela De Mendoza a Tokio, que en 2016 fue adaptada al teatro y se estrenó en el Teatro Independencia.
En 2016 su novela El mar de los sueños equivocados ganó el Premio Vendimia en la categoría Infanto Juvenil. En 2019, diario Los Andes publicó en formato de libro electrónico (e-book) su crónica Magia y pasión de Liliana Bodoc.
Sus poemas han aparecido en publicaciones de la Argentina, España, Canadá y Rumania.

Celebración con historia
La primera Bendición de los Frutos se realizó el 2 de abril de 1938, en la Rotonda de los Caballitos de Marly, por iniciativa del gobernador Rodolfo Corominas Segura. En esa oportunidad se utilizó el escenario del Parque General San Martín.
En 1939, la celebración se trasladó a lo que hoy es la Rotonda de la Calesita y recién en 1946, la Bendición se empezó a hacer en el Prado Gaucho del Parque General San Martín.
Desde el año 2016, la ceremonia se volvió itinerante con el objetivo de profundizar el carácter federal de la fiesta vendimial. El primer departamento en recibirla fue San Carlos, luego Malargüe en 2017. En tanto que 2018 y 2019 Rivadavia y La Paz, respectivamente, fueron los departamentos elegidos.
En la Bendición se agradece a Dios por la cosecha y se entrega el nuevo vino ante la presencia de la patrona de los viñedos, la Virgen de la Carrodilla, y la máxima autoridad de la provincia realiza el tradicional golpe de reja. Este año el gobernador Rodolfo Suárez encabezará la primera celebración de su gestión.